Buscar este blog

martes, 10 de agosto de 2010

Laberinto


El árbol de tomates
revive claramente
Un árbol de tomates dulces
trayéndome tu infancia a mi ventana
veo cortarlo de un solo tajo
veo aplastadas sus raíces por una lápida sin nombre.
Vientre juguetón era tiempo atrás este ahora hundido laberinto
cuando desbocado en espiral te olvidabas por un momento de los fósforos
y los tanques del gas.

locos, perros, gatos, ladrones,
piñatas, invitados,
piernas rotas, obrasnegras, porcelanas,
guitarras, pianos viejos, corbatas, candados.

Ya no estoy aquí.
Este jardín oculto entre cuadros y telas garabateadas
ha aceptado mi partida, construyéndose valiente un caparazón blancusco y húmedo.
nadie sabrá que es un álbum de fotos despegadas.
pronto volverá el espíritu de un abuelo familiar a habitarlo.

Notas

búscame aquí donde no sé donde estoy
ponte feliz al verme y no huyas
aunque yo te lo pida.
Me siento como un gato
en mitad del Sahara
con hambre, con sed
con ganas de una revancha.